El
intelectualismo moral socrático identifica el conocimiento como la virtud. Sócrates,
decía que el conocimiento era lo justo para hacer las cosas correctamente.
Según
esta filosofía, cuando haces algo mal es producción del desconocimiento, por lo
cual esto no es voluntario, ya que el conocimiento te hace obrar virtuosamente. Todo
esto es una teoría moral para que la conducta se base en el conocimiento del
bien y la justicia, incluso decía que con el conocimiento ya se nace, no es
algo que se pueda aprender. Sócrates
desarrolló esta teoría a partir de la afirmación de que el hombre esta formación
por una parte material que es el cuerpo y otra no material, el alma. Por eso se
le da importancia a los valores internos, y que la salud reside en el alma. La
salud se alcanzará por la virtud, haciendo el bien, que a su vez se alcanza con
el conocimiento.
Todo
esto llevará al ser humano a la felicidad y satisfacción.
A diferencia de lo que había ocurrido con la filosofía
griega, la filosofía medieval centrará su interés en Dios. El tema principal de
reflexión es la divinidad, quedando subordinada la comprensión e interpretación
del mundo, del hombre, de la sociedad, etc.
Podríamos destacar:
-San Agustín de Hipona (354-430). Supone la
primera gran síntesis entre el cristianismo y la filosofía platónica. Aunque
inspirado por la fe, que se confunde con la razón el pensamiento de San Agustín
dominará el panorama filosófico tomista, ejerciendo un influjo considerable en
la práctica totalidad de pensadores cristianos durante siglos.
-San Anselmo de Canterbury (1033-1109). Conocido
así por haber sido arzobispo de dicha ciudad durante algunos años. Su educación
corrió a cargo de los benedictos, luego en su experiencia poco afortunadacon el primero de los profesores a los que
fue encomendado, al no haberle sabido transmitir el aprecio por los estudios.
-Sto Tomás de Aquino (1225-1274). La obra de Sto
Tomás es el resultado de la síntesis de la filosofía aristotélica con la
tradición filosófica y teológica del cristianismo y en cuanto tal, representa
el momento cumbre de la Escolástica cristiana. Surgido en un ambiente polémico,
se irá imponiendo paulatinamente, hasta ser aceptada por las altas jerarquías
de la Iglesia.
-Guillermo de Ockham 81285-1349). No se conoce
mucho del lugar de su nacimiento. Según unos nació en el llamado Ockham, en el
condado de Surrey, al sur de Londres, mientras que otros consideran que Ockham
es simplemente su apellido. Se sabe que ingresó muy joven en la orden
mendicante de los franciscanos, y que realizó estudios en Oxford, alcanzó el
grado de “magister”, llegando a enseñar lógica y teología en las escuelas
franciscanas hasta el año 1323, en que fue convocado a Aviñon por la corte
pontificia, acusado de hereje.
-Tomás Moro (1478-1535). Tras la realización de
sus primeros estudios pasa a formar parte del séquito del cardenal arzobispo de
Canterbury Juan Morton, donde continuó su formación. Fue en Oxford donde completó su formación intelectual
orientada al estudio de los clásicos.
La filosofía de Platón se destaca principalmente por la
Teoría de las ideas. En ella se pueden distinguir dos tipos de realidades:
-Realidad inteligible; inmortal, eterna…. Representa al ser.
-Realidad sensible; cambiante, material….. Representa a las cosas.
Las cosas, en la realidad
sensible son susceptibles de opinión o doxa. En la realidad inteligible la idea
es susceptible de un verdadero conocimiento.
Las ideas no se pueden confundir con
el concepto, las ideas representan la
esencia de los objetos de conocimiento. Las ideas de Platón no son contenidos
mentales designados por el concepto.
En la realidad sensible, el
problema del cambio lleva a Platón a buscar una solución que guarda paralelismo
con los filósofos pluralistas.
La teoría de las ideas pretende
solucionar el problema de la unidad de
la diversidad.
Platón presenta el mito de la caverna
como explicación a las cuestiones relativas a la teoría del conocimiento.
Nosotros somos como los prisioneros de la caverna, encadenados e inmóviles.
Cuando son liberados, según Platón, irán descubriendo poco a poco niveles de
realidad cada vez más auténticos.
El hombre es cuerpo y alma. El
alma al pertenecer al mundo de las ideas es más valiosa. El alma debe servirse
de su parte racional para controlar la voluntad.
A través del alma racional se
adquiere el conocimiento y controlar las pasiones.
Saber y felicidad son las
finalidades del hombre para que el saber sea posible.
(354-430) La obra de San Agustín de Hipona fue la primera gran síntesis entre el cristianismo y la filosofía platónica. El pensamiento de este filósofo dominará la filosofía cristiana hasta la aparición de la filosofía tomista.
2. San Anselmo de Cantenbury
San Anselmo era originario de Aosta (Italia) donde nació en el año 1033. A pesar de ello era conocido como San Anselmo de Cantenbury, al haber sido arzobispo de dicha ciudad durante años, donde murió en 1109.
3. Santo Tomás de Aquino
(1225-1274)
La obra de Sto. Tomás de Aquino es el resultado de la síntesis de la filosofía aristotélica con la tradición filosófica y teológica del cristianismo. Surgida en un entorno polémico, que poco a poco, irá siendo aceptada por la Iglesia.
4. Guillermo de Ockham
(1285-1349)
Ingresó muy joven en la orden mendicante de los franciscanos y realizó sus estudios en Oxford, y alcanzó el grado de "magister", llegando a enseñar lógica y teología en las escuelas franciscanas de París, hasta el año 1323, en el que fue acusado de herejía.
5. Santo Tomás Moro
(1478-1535)
Nació en Londrés, una familia acomodada y noble. Tras la realización de sus primeros estudios pasa a formar parte del séquito del cardenal arzobispo de Canterbury Juan Morton, donde continuó su formación, profundizando en los estudios teóricos. Sin embargo, será en Oxford donde completará su formación intelectual y allí entrblrá amistad con otros humanistas de la época, como Erasmo.
Somos alumnos de 2º de Bachillerato del instituto Ben Al Jatib.
Hemos hecho este blog para que a partir de él podamos escribir sobre la filosofía, para hacernos pensar y expresar nuestras pensamientos en relación a esta asignatura y para que todo el mundo que le interesa estos temas puedan tener acceso a conocer más información.
Además este blog nos sirve para entender la filosofía mejor, es un método eficaz para dar esta asignatura.
Los sofistas fueron pensadores que vivieron en la antigua Grecia desde mediados del siglo V a comienzos del siglo IV antes de Cristo. El conocimiento de las ideas de los sofistas procede principalmente de Platón.
El más antiguo sofista fue Protágoras de Abdera.Su doctrina se basaba en el principio del relativismo que lo refiere todo a la medida humana.
Otro sofista fue Gorgias de Leontini que vivía en Atenas en el 427. Tenía desprecio por la ciencia y por todo conocimiento. Para Georgias no existía nada y si existiera alguna cosa, no se podría conocer y si se llegara a conocer, el lenguaje humano no permitiría comunicar ese conocimiento a nadie más.
Sócrates fue el más importante.Colocó los problemas humanos y combatió las ciencias puras.Los estudio útiles para Sócrates se reducen al estudio del hombre, pues da paso a verdades superiores y absolutas. Con estas ideas se está ya en la línea del platonismo, ya que Platón fue alumno de Sócrates.
Platón creyó en la existencia de dos tipos de realidad o tipos de mundos: el mundo sensible y el mundo inteligible o mundo de las Ideas. El Mundo Sensible consta de realidades, en él que se da la multiplicidad, el cambio, la generación y la destrucción, cosas materiales, temporales y espaciales. Por su parte, el mundo Inteligible consta de realidades universales, es el mundo de las ideas. Las ideas no están sometidas a cambio, son eternas, invisibles y no materiales. Se conocen por la razón.
Por una parte, el relativismo moral se fundamenta en la creencia de que no es posible determinar ni de manera natural ni de manera racional todos los seres dotados de razón, lo que es moralmente correcto. Según los sofistas y los relativistas morales en general, las normas que regulan las relaciones entre los individuos son siempre convencionales. Se aceptan por interés, por conveniencia y no tienen otra razón de ser interés y conveniencia. La consecuencia de esta doctrina es que ninguna actuación puede ser considerada buena o mala. Todo depende del parecer o de la opinión de los individuos. Los individuos juzgan sobre lo bueno y lo malo en función de su modo de ser, de sus intereses o del proyecto que se traen entre manos. Es moralmente bueno lo que nos parece moralmente bueno, sólo durante el tiempo en que nos lo parece. Y no hay ninguna conducta que pueda ser considerada en sí mima prohibida.
Entendemos como Navaja de
Ockham a la teoría basada en la oración: "en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla suele
ser la correcta". Esta teoría nos puede ser útil para muchos temas
como económicos, científicos etc, pero sin nos centramos en el ámbito
filosófico tenemos que basarnos en la expresión
la pluralidad no se
debe postular sin necesidad. La navaja de Ockham es un principio de
simplificación, que afirma que si estamos entre dos opciones, probablemente la
más simple sea la correcta. Esta idea de simplificar tiene una semejanza con
los antiguos griegos, quienes no eran partidarios de lo rebuscado, complicado y
sufridor.
Junto
a este principio debemos asociar el nombre del filósofo medieval inglés William
de Ockham. Aunque probablemente filósofos
anteriores llegaron a esta teoría, Ockham la tuvo muy presente durante toda su
vida y además fue quien la dio a conocer, por lo tanto, se merece que su nombre
aparezca en la teoría. El filósofo, que además era franciscano, discutió con el
Papa por otros asuntos, y fue excomulgado. Finalmente escribió un tratado en el
que quería demostrar que el Papa ere hereje. Podemos percibir la rebeldía del
franciscano y como sobresalía entre el resto. Umberto Ecco basó a su personaje principal, llamado también Guillermo, en este filósofo, en su película El nombre de la rosa.
Actualmente la
teoría está siendo usada para aspectos que Ockham no podría imaginar. Por ejemplo,
los ateos se pueden basar en ella, no creen en la existencia de Dios ya que las
hipótesis que son solucionadas con la existencia de este ser, son resueltas con
otras cuestiones científicas. Algunos creacionistas se basan en la navaja de
Ockham para defender el creacionismo frente a la evolución, la cual es un
mecanismo mucho más complejo.
Otros han
justificado con la teoría que de lo que se puede menos, hacerlo de más no sirve
para nada. Este pensamiento es totalmente erróneo según William ya que el habla
de menos cosas, nunca habla de menos cantidad.
La teoría ha presentado
muchas discrepancias y polémicas a la hora averiguar que entendemos por simplicidad
dentro de una situación. Además, bajo mi punto de vista, este criterio es una
forma de elegir entre dos opciones pero sin ninguna certeza de que sea la
correcta, además no existe ninguna prueba científica de que la opción simple sea la correcta. Juega con
la probabilidad, ya que existe la mitad
de posibilidades, si nos encontramos ante dos opciones, de que la opción simple sea la correcta. Por
otra parte, creo que la teoría es bastante útil a la hora de no continuar buscando
otras opciones si ya tienes una factible. A pesar de esto, la utilidad te puede
conducir a una ignorancia grave, a la hora de no querer conocer más de lo que
tú ya sabes.
Santo
Tomás de Aquino pensaba que los argumentos para llegar a la existencia de Dios
a partir de la noción de Dios no eran adecuados con los conocimientos que tiene
el ser humano.
Este
filósofo opina que la ciencia debe partir desde lo más conocible para nosotros,
pero el mundo en el que vivimos, ofrece a los sentimos más realidad que las
realidades más puras conocidas.
Santo Tomás tenía una idea muy clara: si Dios ha creado el mundo, tienen que haber
huellas, al igual que cualquier autor deja sus huellas para ser recordado.
Tomás
de Aquino, dejó claro que la existencia de Dios no es demostrable porque es un
articulo de fé, el artículo es demostrable pero sus contenidos no lo son.
También
decía que la demostración está en lo que es. Respecto a Dios no podemos saber
que és, sino solo qué no es.
Si se
demostrase su existencia por sus actos, no es correspondido. Sus actos son
finitos y éles infinito, esto no es proporcional.
A todo
esto se le añade, que cada persona siempre tendrá un pensamiento distinto, y
por muchas teorías que hayan así, las personas ven lo que quieren.
Este
mito, se trata de una explicación metafórica, realizada por el filósofo griego
Platón al principio del libro VII la República, sobre la situación del ser
humano respecto al conocimiento. En esta
teoría Platón explica los dos mundos: el mundo sensible ( a través de los
sentidos) y el mundo inteligible ( solo alcanzable con el uso de la razón). Platón
describió este mito en una caverna, en el cual se encuentran un grupo de
personas, prisioneras desde su nacimiento, con cadenas que les sujetan el
cuello y las piernas de forma que solo pueden mirar hacia la pared sin poder
girar la cabeza. Justo detrás de ellos se encuentra un muro y un pasillo con
una hoguera y la entrada de la cueva que da al exterior. Por el
pasillo circulan hombres portando todo tipos de objetos cuyas sombras, gracias
a la luz del fuego, se reflejan en la pared que los prisioneros pueden ser.
Los
prisioneros consideran como verdad las sombras que ellos ven.
El mito
continúa cuando un prisionero es liberado y obligado a volver hacia la luz de
la hoguera, contemplando una nueva realidad, realidad más profunda y completa
ya que es compuesta por todas las apariencias sensibles.
El prisionero
liberado ve todo su alrededor ( lagos, árboles, animales, las estrellas, el
cielo,etc) relacionado con el mundo inteligible.
Nuevamente,
el prisionero vuelve a entrar a la caverna para liberar a sus compañeros, pero
todos sus compañeros se rieron de él, por su ceguera al volver pasar del Sol a
la oscuridad de la cueva. El prisionero liberado intenta desatar y liberar a
sus demás compañeros, cuenta Platón que son capaces de matarlo y lo harán
cuando tengan oportunidad, no pudieron distinguir la ayuda de su compañero para
llevarlos hacia la verdad y a su fracaso al ser condenado a muerte.
La navaja de
Ockham es un principio metodológico y filosófico atribuido al fraile
franciscano (Guillermo de Ockham), según el cual: "En igualdad de
condiciones, la explicación más sencilla suele ser la correcta".
Ockham es un
defensor del conceptualismo más que del nominalismo, los nominalistas sostenían
que los universales eran palabras más que realidades existentes, los conceptualistas
sostenían que eran nombres de conceptos, que sí existen, aunque sólo en la mente.
La filosofía
de Ockham se desarrolla aceptando los principios siguientes:
Principio
nominalista:
- Todo lo que existe es individual.
Principio
empirista:
-Es
prioritario el “conocimiento intuitivo” o de experiencia.
- El objeto propio del entendimiento humano era
la esencia de las cosas sensibles.
-Lo
individual sólo puede ser conocido por la experiencia.
Principio
voluntarista:
-El
nominalismo afirma la absoluta voluntad
sobre el intelecto en Dios y en el hombre.
- Se acepta la independencia y omnipotencia
de Dios.
- El cree que el mundo es así porque así lo
ha querido Dios.
En
mi opinión, lo único real es lo que nos afecta a nuestro yo más
interior, a nuestro yo más verdadero. Y lo demás, solo son medios
para conseguir ese “yo”.
Así
que, lo real es la sensación de paz interior que solo quien la busca
la encuentra, y el conocimiento autentico es saber controlar las
emociones. Por lo tanto, tu mente es la que debe dar forma a todo
este caos que se forma con lo que sentimos. La razón de esto es que
nuestra mente es la encargada de hacernos pensar a nosotras mismos, y
así creamos nuestra realidad, es decir, la realidad adecuada para el
ser humano.
Cuando hablamos de lo real podemos diferenciar entre un simulacro y el desierto de lo real. El primero hace que surja un mapa (modelo virtual) por encima del territorio real. Ese mapa (o modelo virtual), construido por los simulacros, llega a suplantar a la realidad, dando lugar a la hiperrealidad. Por ejemplo, Estados Unidos ha construido un mundo que es más «real» que Real, cuyos habitantes viven obsesionados con la perfección.
Esto es el simulacro, el mapa, lo virtual:
Este sería el segundo, el territorio, la verdadera superficie, lo real, lo que se esconde debajo de lo virtual, el desierto de lo real:
Nuestra sociedad vive emergida en el modelo virtual, en los simulacros.Y el único objetivo de esta sociedad que hemos ido creando, es su obsesión por las marcas comerciales. Vivimos en un mundo donde importa más de qué marca sea la falda nueva que te hayas comprado o el nuevo IPhone que haya salido a la venta, que cualquiera otra cosa. Con los años hemos perdido la capacidad de pensar por nosotros mismo, las ganas de aprender e incluso de solucionar un problema por nuestra cuenta. Hemos llegado al punto que sin un ordenador, un Ipad, un IPhone, etc, no somos capaces de buscar, pensar, hacer... un trabajo, una noticia e incluso una redacción en donde lo único que te han pedido es que escribas lo que opinas, y ese punto es el que más me preocupa, hay personas que, aun pidiéndole su opinión, buscan en Internet para leer opiniones escritas por personas que no conocen y que no saben de donde han podido sacar esas ideas, en vez de pensar por ellos mismos. Y eso si que es un problema importante en nuestra sociedad, y no el que no sepas que ponerte para el sábado noche.
Pienso sinceramente que, o paramos este mundo comercial y adicto a las marcas o no saldremos vivos de aquí. Sí, puede que sea una exageración, pero ¿de verdad creéis que vivir en una sociedad así es vivir? Pues, mi opinión es que no, es que esto no es vivir, esto es malgastar el tiempo de tu existencia y desaprovechar tu inteligencia por la pereza de pensar tú mismo.
Para Sócrates, el bien y el
conocimiento son dos conceptos que van de la mano. Según el filósofo, una
persona que sabe lo que se debe hacer en cada caso y que conoce el bien,
actuará sin causar ningún daño. Considera esta norma como un principio
espontáneo e irracional. Al igual que afirma que una persona que actúa haciendo
el mal es porque no tiene conocimientos suficientes como para saber que eso
está mal hecho, esa persona vive en la ignorancia, y no tiene la capacidad de
clasificar sus actos como buenos o malos.
Con esta teoría intenta justificar y quitarle la culpa a todos aquellos
que actúan dañando a la sociedad, en la cual apuesta ciegamente y cree
positivamente en ella.
Esta teoría se ve compaginada por Platón,
cuando expone su teoría sobre el mito de la caverna. Para Platón, la persona
que alcanzará llegar a el mundo real será únicamente aquella que sobrepase los
conocimientos comunes que posee la sociedad, y experimente ese proceso de huida
del mundo imaginario tan difícil de superar. Solo un grupo de personas está
capacitado para conocer el mundo real, este grupo de personas está compuesto
únicamente por los filósofos y las filósofas. Si complementamos con la teoría
Socrática, podemos concluir que solo los filósofos serán capaces de conocer el
bien y el deber y, que por lo tanto, serán los que podrán actuar ante la
sociedad sin causar ningún daño. Llegado a esta reflexión, la conclusión me
parece bastante radical y restringida.
Primeramente creo que la ignorancia
que causa la acción del mal, no es una falta de conocimientos en algunos casos. Es más bien una carencia de espíritu del
saber, una ignorancia hacia el deber ya que no resulta conveniente para la
persona en la mayoría de los casos. Por lo tanto, por esta parte considero el
intelectualismo moral como un refugio donde se pueden excusar aquellas personas
que conocen el bien y el deber, pero que hacen como si no estuvieran educados
en esto para actuar de forma maligna. De todos modos, pienso que no todas las
personas que actúan de esta forma presentan la misma condición. La mayoría de los casos, es como Aristóteles
dice: falta de conocimientos, y creo que por ese motivo estarán justificados
eternamente. Pero no por esta razón debemos dejar pasar al otro sector que se
aprovecha de esta teoría.
Por otro lado, no creo que esa
restricción que aporta el mito de la caverna a la teoría sea tal que así.
Existen muchas más plazas libres a la hora de hacer el bien que las que los
filósofos ocupan, pero para ocupar estas plazas, se debe llegar a el estado de
sabiduría que alcanzan estos tipos.
En conclusión, veo este
positivismo aristótico de la sociedad totalmente real y cierto, exceptuando uno
casos, pero no acepto la compaginación que se le hace junto con la teoría
platónica. Creo firmemente que cualquier persona de esta sociedad está
capacitada para ocupar esas plazas que dejan libre, todo es cuestión de
educación, esfuerzo, y afán por aprender.
Su propósito es un mundo de posibilidades para reflexionar, en los que se basaba como objetivo en la búsqueda de la verdad y en lo moral. En la vida es necesario para vivir, hacer el bien y para actuar bien hay que aprender a hacerlo. Sócrates afirma que nadie actúa mal y quien lo hace es por ignorancia.
La ignorancia es la raíz y el tallo de todo lo malo, porque es algo semejante a la maldad, y a esto se le denomina intelectualismo moral.
Se afirma de que hay que hacer el bien y así llegar a conseguir la felicidad, poniéndose en práctica los conocimientos que poseemos. Si la ignorancia es falta de creencia y cultura, entonces en la ignorancia es donde se encuentra la mayor maldad.
Sin embargo, Aristóteles rechaza el intelectualismo moral de Sócrates y de Platón ya que piensa que no toda la maldad es ignorancia. Incluso la ignorancia es una forma de ver un castigo, que en general, en todos los casos de ignorancia lo son.
En la vida se encuentran dos conceptos, hay un Dios, y es el conocimiento y una maldad que se basa en la ignorancia.
La cuestión es que si actuamos de forma ética o moral escogemos el mal conscientemente, por debilidad, o por el contrario, escogemos el mal por ignorancia, que la tomamos como si pudiera ser un bien.
Mi teoría es que siempre actuamos así para perseguir algo y esto nos sea útil, en busca de un bien para nosotros, incluso cuando nos equivocamos y perseguimos un espejismo. Aunque la decisión ética no consiste en elegir entre el blanco o el negro, ni el bien o el mal, sino entre ambos casos y poner un punto medio entre ellas.